El cardenal venezolana Baltazar Porras denunció en horas de la noche del sábado que le impidieron viajar hasta Isnotú, estado Trujillo, donde tenía previsto asistir a una misa por el natalicio de José Gregorio Hernández, el primer santo de Venezuela.
El cardenal tenía previsto encabezar la eucaristía central y los actos religiosos organizados por la Diócesis de Trujillo en homenaje al “médico de los pobres”, pero funcionarios del Gobierno habrían restringido su desplazamiento sin ofrecer explicaciones oficiales.
Según trascendió, las autoridades argumentaron “razones de seguridad y coordinación logística”, aunque desde sectores de la Iglesia católica consideran que la medida obedece a motivos políticos, dado el papel de Porras como una de las voces más críticas frente a la gestión de Nicolás Maduro.
El cardenal Porras, quien fue delegado papal para la beatificación de José Gregorio Hernández en 2021, expresó su pesar por no poder asistir a los actos, reiterando su compromiso con “mantener viva la fe y el ejemplo de servicio del beato venezolano”.
Hasta el momento, ninguna autoridad del Ejecutivo se ha pronunciado oficialmente sobre la decisión que impidió la participación del cardenal.
